El control de la eyaculación: todo lo que necesitas saber
La eyaculación es una respuesta natural del cuerpo masculino durante la actividad sexual. Sin embargo, para algunas personas, la eyaculación puede convertirse en un problema cuando se pierde el control sobre ella. Afortunadamente, existen técnicas y ejercicios que pueden ayudar a mejorar el control de la eyaculación y disfrutar de una vida sexual más satisfactoria. En este artículo, te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre el control de la eyaculación.
Tipos de problemas de control de la eyaculación
La eyaculación precoz es un problema común que se produce cuando el hombre eyacula antes de lo deseado, a menudo dentro de los primeros dos minutos de la relación sexual. Por otro lado, la eyaculación retardada se produce cuando el hombre tarda demasiado tiempo en eyacular o no puede eyacular en absoluto. Ambos problemas pueden tener un impacto negativo en la vida sexual y en la relación de pareja.
Causas y factores de riesgo
Existen diversas causas que pueden provocar la pérdida del control de la eyaculación, como la ansiedad, el estrés, la depresión, los problemas de pareja, entre otros. La falta de habilidades sexuales o la falta de experiencia también pueden ser factores contribuyentes. Es importante tener en cuenta que estos problemas no están relacionados con la masculinidad, sino que son problemas de salud sexual que pueden afectar a cualquier persona.
Técnicas de control de la eyaculación
Existen diversas técnicas que pueden ayudar a mejorar el control de la eyaculación. Una de las más populares es la técnica del apretón, que consiste en apretar suavemente la punta del pene justo antes de alcanzar el orgasmo para detener temporalmente la estimulación. Otra técnica es la distracción, en la que el hombre se concentra en algo diferente a la actividad sexual para reducir la excitación. También existen técnicas de respiración y otras técnicas más avanzadas que pueden ayudar a mejorar el control de la eyaculación.
Ejercicios de entrenamiento para el control de la eyaculación
Los ejercicios de Kegel son un tipo de ejercicio que se realiza para fortalecer los músculos del suelo pélvico. Estos músculos son responsables de controlar la eyaculación y mejorar la resistencia sexual. Además de los ejercicios de Kegel, existen otros ejercicios que pueden ayudar a mejorar el control de la eyaculación y la resistencia sexual.
Tratamientos médicos
En algunos casos, puede ser difícil mejorar el control de la eyaculación por cuenta propia. Si los problemas persisten y están afectando negativamente la vida sexual y la relación de pareja, es importante buscar ayuda profesional. Un médico o terapeuta especializado en salud sexual puede ayudar a identificar la causa subyacente del problema y proporcionar las herramientas necesarias para mejorar el control de la eyaculación. A continuación, se describen algunos de los tratamientos médicos más comunes para el control de la eyaculación:
- Anestésicos tópicos: Los anestésicos tópicos son cremas o geles que se aplican en el pene antes del acto sexual para reducir la sensibilidad y mejorar el control de la eyaculación. Los anestésicos tópicos más comunes contienen lidocaína o prilocaína y se aplican de 30 a 60 minutos antes del acto sexual.
- Antidepresivos: Algunos antidepresivos, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), se utilizan para tratar el trastorno de eyaculación precoz. Estos medicamentos se toman diariamente y pueden tardar varias semanas en ser efectivos.
- Terapia sexual: La terapia sexual puede ser útil para tratar problemas de control de la eyaculación causados por factores psicológicos. Un terapeuta sexual puede ayudar a identificar las causas subyacentes del problema y proporcionar técnicas y herramientas para mejorar el control de la eyaculación.
- Inyecciones de medicamentos: Se puede inyectar una combinación de medicamentos, como fentolamina, papaverina y prostaglandina E1, en el pene para mejorar el control de la eyaculación. Esta técnica se conoce como inyección intracavernosa y se realiza bajo supervisión médica.
- Terapia sexual de pareja: Si el problema de control de la eyaculación está afectando negativamente la relación de pareja, la terapia sexual de pareja puede ser útil para mejorar la comunicación y la intimidad en la relación sexual.
Es importante recordar que los tratamientos médicos deben ser prescritos y supervisados por un médico especializado en salud sexual. Cada tratamiento tiene sus propias ventajas y desventajas, y el médico puede ayudar a determinar el tratamiento más adecuado para cada persona. Bajo ningún concepto trates de probar por tu cuenta ninguno de estos tratamientos.
Consejos y recomendaciones
- Practicar la técnica de la masturbación controlada: Esta técnica consiste en masturbarse hasta justo antes de alcanzar el orgasmo y luego detenerse para reducir la excitación. Repetir este proceso varias veces puede ayudar a mejorar el control de la eyaculación.
- Comunicarse abiertamente con la pareja: Es importante hablar con la pareja sobre las preocupaciones y necesidades sexuales. Esto puede ayudar a reducir la ansiedad y la presión durante el acto sexual, lo que puede mejorar el control de la eyaculación.
- Evitar el consumo de alcohol y drogas: El consumo de alcohol y drogas puede afectar negativamente el control de la eyaculación. Es recomendable evitar el consumo de estas sustancias antes de tener relaciones sexuales.
- Practicar técnicas de relajación: La ansiedad y el estrés pueden afectar negativamente el control de la eyaculación. Practicar técnicas de relajación, como la meditación o el yoga, puede ayudar a reducir la ansiedad y mejorar el control de la eyaculación.
- Fortalecer los músculos del suelo pélvico: Los músculos del suelo pélvico son responsables de controlar la eyaculación. Practicar ejercicios de Kegel y otros ejercicios que fortalecen estos músculos puede ayudar a mejorar el control de la eyaculación y la resistencia sexual.
- Experimentar con diferentes posiciones y técnicas sexuales: Algunas posiciones y técnicas sexuales pueden ser más estimulantes que otras y pueden afectar el control de la eyaculación. Es recomendable experimentar con diferentes posiciones y técnicas sexuales para encontrar las que funcionan mejor para cada persona.
- Buscar ayuda profesional si los problemas persisten: Si los problemas de control de la eyaculación persisten y están afectando negativamente la vida sexual y la relación de pareja, es importante buscar ayuda profesional. Un médico o terapeuta especializado en salud sexual puede ayudar a identificar la causa subyacente del problema y proporcionar las herramientas necesarias para mejorar el control de la eyaculación.
Mejorar el control de la eyaculación puede requerir tiempo y esfuerzo, pero puede tener un impacto positivo significativo en la vida sexual y en la calidad de vida en general. Al seguir estos consejos y recomendaciones, es posible mejorar el control de la eyaculación y disfrutar de una vida sexual más satisfactoria y placentera.
También puedes leer este artículo: Eyaculación precoz: qué es y cómo controlarla
